En compañia de lobos

Hace años ya que el director Neil Jordan [Danny Boy) ; The Crying Game)] dirigiera The Company of Wolves (1985), Una película basada en el libro de Angela Carter titulado “The Bloody Chamber” que llegó a nuestras pantallas rotulada como “Los Aullidos de la muerte” y catalogada como Género de Horror, algo en que acertaran!, porque la crítica de esa época dio puros palos de ciego. La historia habla de Rosaleen (Sarah Patterson), una niña de una acomodada familia inglesa tiene su madurez sexual al llegar su primera menstruación, suceso que es representado por ella mediante un sueño donde sus preguntas y temores son transformados en el cuento de La Caperucita Roja.. ¿simple?.. ¡para nada!.

Una película llena de simbolismos, donde se cuentan historias dentro de historias para revelar la esencia misma de esta. La fertilidad se presenta en forma de pequeñas guaguas que nacen de huevos en un nido, o en forma de Erizo de tierra, símbolo de la fertilidad celta.

La mejor forma de internarse en esta película es comprender que esta se acerca mucho más a la versión original del cuento escrita por Perrault, quien a diferencia de los hermanos Grimm que escribieron como una pobre niña fue engañada por una perversa criatura del bosque, tuvo en su versión original a una caperucita obligada a desnudarse y ser abusada por un animal salvaje. Una tragedia donde jamás se acercó un cazador a salvar a todo el mundo. Por ahí es donde debemos escarbar la historia de The Company of Wolves.

Rosaleen ya en el sueño/cuento tiene a su anciana abuela (Angela Langsbury, La Reportera del Crimen) quien le enseña y la aconseja acerca de las bestias salvaje del bosque y como el animal mas peligroso es aquel que lleva los pelos por dentro. Este personaje es claramente el ente conservador, viejo, gastado, que le aconseja a la chica como enfrentarse a la bestia… huyendo. Saca a colación a su otra nieta, la hermana mayor de Rossaline, culpándola que fue por salirse del camino (la vía de la rectitud) fue muerta por los lobos. Acá simplemente hace clara alusión al los valores y la estigmatización del hombre como la bestia que solo anda detrás de la pureza, nuestra Caperucita.

La mirada es netamente desde el punto de vista de la mujer, sin ser feminista. Presenta los temores a la desconocida y naciente pubertad, donde la niña descubre un mundo y un poder maravillosos y el hombre es un ser que solo se comporta como un animal. Hay miradas de inocencia y conversaciones con pequeños, pero pérfidos, despertares. Ese delicado juego del tira y afloja que en su subtexto es la insinuación de un posible un acto sexual descarnado, que sugiere una batalla a muerte entre lo bello y lo horrible,donde lo hermoso juega con las armas mas ruines y sucias… la dulce sexualidad frente al deseo animal… No dista mucho de la realidad.